Los alumnos de 2º de ESO han podido disfrutar de un maravilloso día en la capital andaluza. Aunque el tiempo amenazaba lluvia y esto podría dificultar las visitas que se tenían previstas, el sol acabó luciendo y acompañándolos en su recorrido.
Sevilla monumental, la historia cobra vida
Tras llegar a Sevilla, los guías turísticos esperaban cerca de la icónica Torre del Oro, llamada así por los pequeños azulejos dorados que la cubrían y que, a día de hoy, permanecen en la zona superior del monumento. Ahí comenzaba esta aventura, desde la réplica de la Nao Victoria que demostró con su vuelta al mundo que la Tierra no era plana, hasta adentrarnos en el famoso y conocido barrio de las Cruces, la antigua judería.
Al pasar por algunas de las estrechas y blancas calles como la de la Vida, la Muerte o la Gloria, los alumnos pudieron revivir la riqueza que suponía el cruce de culturas, el convivir y aportar a la ciudad sus saberes y habilidades: los musulmanes con su artesanía y los judíos como tesoreros del patrimonio económico. Las leyendas de este barrio cobraban vida al ser contadas por la guía y pisar el suelo que pisaron nuestros antepasados, como la de la bella Susona que traicionó a su familia por amor a un guardia real.
Tras este bello recorrido llegaron al monumento en honor del descubrimiento de América, el lema “Plus Ultra” que significa más allá, la Tierra no era plana y había mucho más allá de lo conocido.
El Real Alcázar, arte mudéjar en el Palacio del Rey Don Pedro I
¡Qué maravilla de la arquitectura! Al pisar el Palacio del Rey Don Pedro, las miradas seguían cada rincón del edificio, muestra inequívoca de respeto y acogida a las diferentes culturas. En su interior pudieron conocer más acerca del arte mudéjar, cómo el árabe de las paredes se funde con los escudos de los reinos cristianos. Leones y castillos por doquier, símbolos de la grandeza de los reinos, y el agua que significa vida en los estanques del recinto.
Momento memorable sin duda fue aquel en el que pudieron dar unos pasos de baile típicos de la Edad Media gracias al patrón de azulejos de la solería, función que pasaba desapercibida. ¡Qué divertido sentirse dama o caballero en un baile de la realeza!
Tras esto, compartieron el almuerzo en una plaza cercana y pusieron rumbo a Antequera. Sin duda, una jornada diferente en la que lo aprendido en el aula se hacía presente ante sus ojos en el increíble patrimonio de Sevilla.
