Esta semana los alumnos de 2º de Educación Infantil han experimentado con el “Grafismo Creativo”, a partir de la elaboración de unos copos de nieve que han servido para decorar la clase.
Esta técnica es una manera diferente y divertida de trabajar la grafomotricidad, es decir, es el paso previo y de acompañamiento a la escritura, desde una vertiente más artística.
El objetivo de la grafomotricidad es que el niño adquiera las habilidades necesarias para que llegue a expresarse por medio de signos escritos, mediante ejercicios que permitan el mayor dominio del antebrazo, la muñeca, la mano y, sobre todo, los dedos.
Trabajar el grafismo creativo desde edades tempranas es una estupenda manera de iniciar a los niños y niñas en el trazo y la grafía, estimulando la creación libre y espontánea, potenciando las capacidades de atención y concentración, la direccionalidad, el dominio del espacio, la pinza necesaria para escribir y el manejo de conceptos como los colores, formas, dimensiones, seriaciones y otros conceptos matemáticos.
Además, fomenta la confianza en ellos mismos y la motivación por el aprendizaje. Otra ventaja es que así adquieren destrezas fundamentales para el desarrollo perceptivo: manipulando, explorando, investigando y experimentando con diferentes materiales y colores.
Actividades de este tipo forman parte de los prerrequisitos para trabajar la escritura. Siendo estos principalmente:
– Habilidades motoras, que incluyen la lateralidad, el esquema corporal, la disociación de las distintas partes del cuerpo implicadas, la coordinación dinámica, equilibrio, coordinación visomotriz y direccionalidad.
– Organización visoespacial, con los movimientos oculares y sacudidos, la discriminación, la memoria visual, la organización espacio temporal.
– Habilidades cognitivas, de sensopercepción como la observación, atención, percepción y clasificación.
– Habilidades cognitivas de razonamiento como la elaboración de hipótesis, formación de conceptos, cambios y secuencias, análisis y síntesis.
– Lenguaje y sistemas de información, en donde entra lo receptivo y lo expresivo y la conciencia fonológica.
Lo más importante es que los alumnos se sienten altamente motivados al realizar este tipo de actividad. Al ser cada una de las creaciones únicas, todos se sienten importantes favoreciendo también la autoestima de nuestros alumnos, aportando lo mejor de cada uno de ellos al aula.
